"La transformación del guerrero interior".
Estos pendientes fueron diseñados para una persona con Sol y Venus en Aries opuestos a Plutón en su carta astral.
Marte es el arquetipo del guerrero y rige Aries. Habla de cómo tomamos acción y de nuestra energía a la hora de perseguir nuestras metas. Si el guerrero no trabaja al servicio del Sol, no tendremos el empuje necesario para lograr nuestros objetivos cada día.
Un Marte vibrando alto es muy importante para una persona con Sol en Aries. Por eso en este caso es vital transformarlo.
Un Sol en Aries habla de una misión de vida rompedora, de iniciar caminos con valentía que luego otros seguirán. Venus es la diosa del disfrute, la sensualidad y el amor. Rige aquello que nos gusta y nuestras relaciones con los demás. Venus en Aries habla de alguien a quien le gusta el liderazgo, la acción y la vitalidad.
Sin embargo, Venus se encuentra inmersa en la energía del guerrero y por tanto necesita elevar su vibración. Las energías femeninas de Venus no se encuentran cómodas. En lugar de centrarse en disfrutar y seducir, sus energías naturales, se encuentra con que empuña una espada y que tiene batallas que librar.
La turmalina negra está vinculada a las energías profundamente transformadoras de Plutón. Nos ayuda a deshacernos de todo lo que nos impide evolucionar.
Las formas femeninas son redondeadas, receptivas y suaves. Las formas masculinas son rectas, incisivas y enérgicas. Las joyas pertenecen a Venus en alta vibración.
Estos pendientes para el alma tratan de que haya un abrazo transformador entre las energías femeninas y masculinas que habitan en el interior de esta persona. Estas energías deberán dialogar en armonía para lograr todo lo que se proponga y además, lo más importante: poder disfrutar por el camino.
Plata de ley y turmalina negra. Hecho a mano.
Incluye una bella lámina con simbología completa.